Tadeo y el penal de San Miguel: el caso que cimbró a México

Tadeo, un bebé de menos de cuatro meses de nacido, fue descubierto muerto al interior del penal de San Miguel, en Puebla. El cuerpo había sido enterrado y presentaba una incisión ea la altura del abdomen.

El macabro hallazgo sucedió el pasado lunes 10 de enero. Pero 15 días después aún no se sabe qué pasó. Y las autoridades locales parecen no tener prisa por esclarecer el caso.

El cuerpo de Tadeo fue descubierto por un interno el pasado 10 de enero y reportado a las autoridades penitenciarias. La noticia no trascendió, hasta que la activista Saskia Niño de Rivera decidió investigar y darle visibilidad al caso.

La fundadora de Reinserta, una organización que trabaja con niños y jóvenes que han estado expuestos a situaciones traumáticas relacionadas con el sistema de justicia penal, logró obtener datos concretos.

El niño se llamaba Tadeo Ayala Peralta, nació el 4 de octubre de 2021, murió por problemas intestinales el 5 de enero y el 6 de enero fue enterrado en el panteón San Andrés Tolentino de Iztapalapa.

Una vez que la noticia apareció en medios nacionales unos días después, los padres de Tadeo sospecharon que podría tratarse de su hijo.

Según refiere el columnista Héctor de Mauleón en el diario El Universal, los padres entonces se trasladaron al panteón y descubrieron que el cuerpo de su hijo ya no se encontraba en su tumba.

De acuerdo con Saskia Niño, ambos fueron amenazados al ver que el cadáver de su bebé ya no estaba.

El terrible caso ha cimbrado a la opinión pública en México y ha abierto una serie de preguntas que aún no tienen respuesta por parte de las autoridades investigadoras:

¿Por qué lo llevaron al pequeño Tadeo al penal?

¿Quién lo ingresó?

¿Cómo logró ingresar?

¿Quién lo permitió?

¿Por qué nadie cuestionó su no salida?

¿Qué dice el director del penal? 

¿Quiénes intimidaron a los padres de Tadeo?

Hasta ahora, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, ha tomado distancia del caso y ha evitado pronunciarse demasiado al respecto.

Según refiere la Fiscalía estatal, la cual brilló por su hermetismo en días recientes, ya fueron identificadas las personas que ingresaron a Tadeo al infame penal de San Miguel, un centro penitenciario con 43% de sobrepoblación, donde regularmente se encuentran armas, drogas, extorsión, falta de gobernabilidad y mucho más –  y el cual reprobó en 2019 un diagnóstico nacional de supervisión penitenciaria realizado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Hoy, los indicios apuntan a una red criminal que habría exhumado el cadáver del pequeño para introducirlo al penal de San Miguel – probablemente, con droga dentro.

Y es que la podredumbre que reina en los centros penitenciarios, y que no ha podido o no ha querido ser resulta, también se desborda… más allá de sus muros.