#ConTaconesEntreLegos | Hey You ¿Cuomo No?

Tocar el pecho de una mujer por debajo de la blusa.

Decirle a una mujer casada que, si estuviera soltera, “uy, las cosas que le haría”.

Beso en la boca a la fuerza.

Recorrer mitad del cuerpo de una mujer en un elevador con uno de sus dedos, claro sin consentimiento alguno.

11 mujeres, presuntas víctimas del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo.

¡Ah! Pero eso NO es abuso, según Cuomo.

¿Será que el abuso de poder te permite poder abusar?

¿Cuomo no?

Digo no, nos vayamos tan lejos. El ex presidente Donald Trump aún defiende la famosa frase que dijo en 2005: “Grab them by the pussy”.

Refiriéndose a cómo un hombre con poder puede hacer lo que quiera con una mujer.

“Puedes hacer lo que quieras”.  Textualmente, las palabras de Trump.

Pero… Hey you (frase que Cuomo utilizaba para acercarse a las mujeres que lo acusan) ¿Cuomo no?

¡VIL ABUSO!

Porque al ejecutar este tipo de actos, sin el consentimiento de la mujer, no se le puede llamar de otra forma.

El reporte que hizo público Letitia James, procuradora general de Nueva York, sobre las fechorías de Cuomo consiste en 74 mil piezas de evidencia y entrevistas realizadas a 179 personas.

74 mil piezas de evidencia y 179 entrevistas, ¿se les hace poca cosa?

Obviamente, eso basta como prueba.

Sale sobrando el slideshow animado que presentó Cuomo para excusarse.

¡Pena ajena!

En el slideshow se muestran varias fotografías con personas a las que Cuomo besó en la mejilla y abrazó durante su carrera política.

Salen, desde una ex empleada, hasta un ex presidente como Bill Clinton.

Aunque debo decir que de Clinton no tiene mucho que aprender, con el afamado Lewinsky Scandal.

¿O no?

Cuomo asegura que él abraza y besa al estilo paternal, pues así lo enseñaron en su casa.

Pues, vaya ética familiar…

Cuomo da a entender que el “pasarse la raya” es normal para él.

Pero de normal, no tiene nada.

Al menos que pensara que, por tener poder, podía “pasarse de la raya”… porque hemos visto que suele pasar.

Aún en pleno 2021.

Según el Pew Research Center, 6 de 10 mujeres en Estados Unidos aseguran que han recibido avances sexuales no deseados.

¡Increíble!

Uno de los investigadores del caso confirma que no se trata de comportamiento “old fashion” como lo asegura Cuomo.

Basta leer, con detalle, la acusación de una de las presuntas víctimas.

En la acusación de una mujer llamada Virginia se detalla cómo Cuomo, con sus dedos, le toca el pecho al deletrear cada letra de su camiseta.

Virginia vestía una playera de la compañía energética en la que trabajaba.

Y los que estaban por ahí al lado, también lo vieron y lo permitieron.

¿Eso no es pasarse la raya?

¡Cuomo no!

No hay Cuomo salirse de este escándalo.

Unos tantos demócratas piden su renuncia.

Hasta el mismo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pide la renuncia de Cuomo.

Pero Cuomo piensa lo contrario y cree que aún la puede librar, con una que otra movida (no de las que hizo, por supuesto).

Y es que, al parecer, su hermano Chris Cuomo, uno de los principales anchors de CNN, lo asesora en todo momento.

Le dice cómo y cuándo debe reaccionar ante las terribles acusaciones.

Pero ni salir a defender lo indefendible perdona.

¡Vaya dúo!

De hecho, traen un grave problema, pues Chris se inmiscuyó tanto en defender a Andrew, que la ética y el periodismo quedaron de lado.

Chris nunca mencionó la situación de su hermano en su programa Cuomo Prime Time.

Y vaya que si fuera otra persona le dedicaría el programa completo.

¿Cuomo no?

Ahora, Chris también está en la mira.

La falta de ética en el caso Cuomo se respira por todos lados.

¿O le tenemos que recordar al aún gobernador de Nueva York lo que pensaba antes de que se emitiera el informe sobre el acoso a 11 mujeres?

Hey you…. ¿Cuomo no?