¿Cuánto falta para la elección?

17 de mayo 2024

2 de marzo 2023

¡Que alguien me explique!

El Efecto Musk: Nuevo León XXI

El esperado anuncio del magnate Elon Musk, el hombre más rico del planeta, se dio ayer en el Investor Day 2023 de Tesla, que tuvo lugar en Austin, Texas

Por Ramón Alberto Garza

COMPARTE ESTA HISTORIA

El esperado anuncio del magnate Elon Musk, el hombre más rico del planeta, se dio ayer en el Investor Day 2023 de Tesla, que tuvo lugar en Austin, Texas.

Nuevo León fue confirmado como la nueva sede de la nueva Gigafactoría para ensamblar el icónico automóvil eléctrico que ya se fabrica en California, Nevada, Texas y Shanghái. La del área metropolitana de Monterrey, en Santa Catarina, será la quinta a nivel mundial.

Por el monto de la inversión y su impacto en el ecosistema industrial de la metrópoli regiomontana, este anuncio será equiparable a los días de la primera mitad del siglo XX, cuando en Nuevo León fueron fundadas empresas como la Cervecería Cuauhtémoc, la Fundidora de Fierro y Acero, la Vidriera Monterrey y Hojalata y Lámina, que fueron la antesala de los conglomerados industriales de clase mundial como FEMSA, Cemex, Alfa y Vitro.

Pero para que podamos medir en su justa dimensión en dónde estamos parados, la cadena de suministro -es decir, la de proveedores de partes y componentes- que tienen las actuales cuatro Gigafactorías de Tesla alcanzan ya unas 10 mil grandes, medianas y pequeñas empresas, instaladas en 45 países. Midan el efecto multiplicador económico y social que una operación así tiene para cualquier metrópoli.

Así podrán imaginar el impacto y la redefinición industrial que eso significará para Nuevo León, que fuera de su industria aeroespacial reflejada en corporaciones como Frisa, la mayoría de sus empresas operan en ramos tradicionales de materias primas, bebidas y energía tradicional basada en el petróleo.

Lo que intentamos advertir es que, la instalación de Tesla inevitablemente catapultará a Nuevo León de su industria tradicional del siglo XX a ser punta de lanza en la fabricación de las nuevas tecnologías de la movilidad que comienzan ya a dominar el siglo XXI.

Solo para dar una idea de la velocidad del cambio, a Tesla le tomó 12 años el producir su primer millón de vehículos. Hoy, con su explosivo crecimiento, solo necesita siete meses para fabricar ese mismo millón de autos eléctricos. Y conforme los precios se reduzcan, como prometió Elon Musk en la conferencia de ayer, y se eleve la oferta de autos eléctricos a nivel global, no tardaremos en hablar de que Tesla podrá fabricar un millón de autos al mes.

La otra cara oculta de lo anunciado ayer en el Investor Day 2023 de Tesla es la ruta acelerada que la Inteligencia Artificial está asumiendo en los nuevos modelos de autos eléctricos. Y eso, aunado a la magnetización de calles y avenidas, será también en muy poco tiempo una revolución en la movilidad con la integración de la robótica en la conducción de los autos.

¿Imaginan el salto cuántico que pueden llegar a tener el Tecnológico de Monterrey, la UANL, la UDEM, la Universidad Metropolitana o la Universidad Regiomontana, cuando tomados de la mano y con recursos de Tesla puedan convertirse en los laboratorios de prueba de lo que serán esas nuevas tecnologías de punta a nivel mundial?

Muy bien por el esfuerzo del gobernador de Nuevo León, Samuel García, quien alcanzó con su equipo a negociar la Gigafactoría que -si cuidan su evolución- podría pasar a la historia como a principios del siglo pasado lo hizo el gobernador Bernardo Reyes, a quien se le reconoce el primer despegue industrial de la entidad.

Mejor aún que el mandatario neoleonés no entrara en confrontación abierta con un presidente Andrés Manuel López Obrador que intentaba, por la ruta política, caprichosa y del golpe en la mesa arrebatarle la nueva planta de Tesla a Nuevo León. Fue obligado a recular.

Y de primera, la posición no negociable de Elon Musk, quien se plantó bien y bonito para defender su nueva Gigafactoría, en un estado que sabe que le garantizará cercanía con el mercado estadounidense y elevada calidad de mano de obra calificada y de mente factura suficientes para cumplir con las exigencias que imponen los dueños de una corporación global como Tesla.

Publicidad
Publicidad
Publicidad