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Scherer, 1; Gertz, 0

El caso armado por los fiscales adscritos a Alejandro Gertz Manero para acusar a Julio Scherer Ibarra y a un despacho de abogados de intentar extorsionar al abogado Juan Collado se les cae de las manos

Por Ramón Alberto Garza

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En la Fiscalía General de la República están inquietos, nerviosos e incluso desesperados.

El caso armado por los fiscales adscritos a Alejandro Gertz Manero para acusar a Julio Scherer Ibarra y a un despacho de abogados de intentar extorsionar al abogado Juan Collado se les cae de las manos.

Y eso se puso de manifiesto ayer, en una videoconferencia, en la que un juez federal aplazó una semana la audiencia de imputación contra los presuntos inculpados, socios del despacho Araujo, González, Peimbert, Robledo & Carrancá.

Fue evidente que, frente a la posposición de la audiencia, el fiscal federal Manuel Granados Quiroz protestó, mostró una actitud iracunda e incluso lanzó amenazas contra los imputados, advirtiéndoles que buscaría 40 años de prisión por delitos de asociación delictuosa, lavado de dinero y tráfico de influencias.

Y no era para menos. Se les venían abajo los alegatos de una segunda filtración que hicieron ayer lunes, de un supuesto borrador de una carta, sin firma y que jamás llegó a su destinatario, el presidente López Obrador.

En esa supuesta misiva, adjudicada al abogado Juan Collado, se pretende involucrar a personajes como Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Angélica Rivera -entonces esposa de Enrique Peña Nieto- Diego Fernández de Cevallos, Carlos Ahumada, Alejandro Quintero, Humberto Castillejos, entre otros.

La presunta carta fue publicada, a pesar de no estar firmada ni haber sido enviada como se presumía, al presidente Andrés Manuel López Obrador, lo que podría ser interpretado como que el abogado Collado no aceptó el texto. Por eso ni lo firmó ni lo envió.

¿Podría el presunto autor de la carta salir a inculpar directamente a la mayoría de quienes fueron sus clientes y amigos, sin acabar de pagar un precio por la traición?

Ese “borrador” de carta contrastó con otra carta dirigida al inquilino de Palacio Nacional, difundida ayer mismo por Código Magenta, escrita de puño y letra, y firmada por el abogado Collado desde prisión.

En ella, el inculpado pide al mandatario interceder para alcanzar con el gobierno de la Cuarta Transformación un acuerdo reparatorio buscando su libertad.

Y en esa carta firmada, y de puño y letra, el inculpado  propone que sea Scherer Ibarra, entonces Consejero Jurídico de la Presidencia, el funcionario negociador para alcanzar ese acuerdo con los hijos del abogado Collado.

Algunos juristas estiman que fue esa carta la que obligó a la Fiscalía General de la República a dejar fuera de cualquier proceso de judicialización a Scherer Ibarra.

Hacerlo, implicaría que para comprobar lo dicho por la carta, y confirmar la decisión de que el Consejero Jurídico de la Presidencia fuera el negociador, se tendría que citar a declarar al mismísimo presidente López Obrador.

Pero la trama de esta disputa judicial incluyó ayer mismo el posicionamiento del inquilino de Palacio Nacional, quien en su intervención en La Mañanera, abogó a favor de Scherer Ibarra y citó al abogado Collado como un hombre ligado a Carlos Salinas de Gortari.

Para ser el primer día de esta partida judicial dentro de la 4T, la aparición de la carta de puño y letra del abogado Collado, la desacreditación del “borrador” de carta que nunca se envió ni se firmó, el posicionamiento presidencial en La Mañanera y el aplazamiento de la primera audiencia en medio de un fiscal iracundo, el marcador inicial es Scherer Ibarra, 1; Gertz Manero, 0.

Y para cerrar el día, la Suprema Corte anunció ayer que el próximo 14 de marzo se daría el fallo sobre el caso en el que el Fiscal Gertz Manero mantiene presa, desde hace 500 días, a la hija de su cuñada, a quienes acusa del asesinato de su hermano Federico.

El debate fue enlistado ya en el máximo tribunal judicial y, sin duda, será otro escandaloso espectáculo de conflicto de interés, con epicentro en la ya muy cuestionada Fiscalía General de la República.

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