México en ‘prime time’

Sábado por la mañana en las páginas editoriales de The Wall Street Journal. Mike Pompeo, quien fuera secretario de Estado y director de la CIA en la administración de Donald Trump, carga contra las reformas del Plan C de Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum:

“Los cambios constitucionales y políticos esperados en México van a transformar la relación bilateral con Estados Unidos, causando caos en la frontera e iniciando una probable guerra comercial… Sólo los cárteles que están envenenando a ambos países se van a beneficiar”.

Domingo por la noche, horario estelar en CNN, la cadena de noticias más importante de Estados Unidos. Fareed Zakaria, el prominente periodista de asuntos internacionales que ha sido consultado por el presidente Joe Biden en distintas ocasiones, presenta un programa especial sobre México. Su argumento principal es que, a pesar de la oportunidad que representa el ‘nearshoring’, el país está convirtiéndose en una democracia iliberal con régimen de partido único. Y en Estados Unidos, la derecha ha respondido con una propuesta extrema: una intervención militar en México.

Ya sea en los círculos del Partido Republicano o del Partido Demócrata, hoy México es un tema prioritario para la agenda de la elección presidencial de Estados Unidos. La relevancia de la relación bilateral se resume en tres indicadores.

Primero, el indicador de la crisis migratoria: el año pasado, 2.4 millones de personas cruzaron la frontera mexicana para ingresar a territorio estadounidense, una cifra récord que ha subrayado las fallas estructurales del sistema de asilo y que ha generado preocupaciones de seguridad nacional.

Segundo, el indicador de la epidemia de fentanilo: 107,543 personas murieron por sobredosis en Estados Unidos en 2023, de acuerdo a datos de la autoridad sanitaria. La administración de Joe Biden responsabiliza directamente al Cártel de Sinaloa y al Cártel Jalisco Nueva Generación por su rol en la exportación de drogas sintéticas.

Tercero, el indicador del intercambio comercial: en 2023, la transacción de bienes y servicios entre ambos países fue de 798 mil millones de dólares. Por segunda ocasión en la historia reciente, México fue el socio comercial más importante de Estados Unidos en un periodo de un año.

Por mandato del T-MEC, México, Estados Unidos y Canadá renegociarán el tratado comercial en 2026. La administración de Joe Biden ha mantenido una política de tolerancia a las violaciones del gobierno mexicano relacionadas con el sector energético y con el bloqueo al maíz genéticamente modificado. Sin embargo, eso podría cambiar en la siguiente administración, particularmente si Donald Trump gana la elección presidencial.

De acuerdo a una proyección de la revista The Economist, Trump tiene una probabilidad de dos tercios de regresar a la Casa Blanca. Encuestas recabadas por Real Clear Politics muestran que el candidato del Partido Republicano lidera en seis de los siete principales estados balanza: Arizona, Nevada, Michigan, Pennsylvania, Virginia y Georgia. 

Una victoria de Donald Trump representa el principal riesgo para la continuidad del T-MEC y, en consecuencia, para la estabilidad económica y política de México. En noviembre, la reacción de los mercados podría ser más adversa para México que lo que fue en junio, cuando Wall Street entendió que Morena obtendría la mayoría calificada prácticamente en ambas cámaras del Congreso.

El equipo económico de Donald Trump está planteando un arancel de 10 por ciento a todas las importaciones, una tarifa de 100 por ciento a los bienes con componentes de origen chino y propone recortar la tasa de impuesto corporativo a 21 por ciento. La combinación de estas tres políticas sería fatal para el fenómeno ‘nearshoring’ y para el futuro económico de México.

Además, los asesores de seguridad nacional de Trump insisten en la idea de ampliar los poderes legales de la Casa Blanca para intervenir militarmente en México, ya sea con la incursión de fuerzas especiales del Ejército o con bombardeos dirigidos.

Durante su gobierno, Trump discutió estas políticas con su secretario de la Defensa, Mark Esper, y con congresistas de su partido. el Pentágono lo frenó en seco. No obstante, Chip Roy, legislador de republicano de Texas, introdujo una legislación en 2019 que pretendía designar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas. La iniciativa no prosperó, pero sentó Ias bases de una plataforma que se ha convertido en el nuevo consenso del Partido Republicano.

Para enfrentar esta realidad, Claudia Sheinbaum, virtual presidenta electa de México, ha designado como secretario de Relaciones Exteriores a Juan Ramón de la Fuente y como secretario de Economía a Marcelo Ebrard. El binomio De la Fuente-Ebrard será responsable de evitar el escenario del desastre.