Los expedientes negros del Ejército Mexicano

¿Qué pasó?

• El Departamento de Estado publicó el informe anual de la situación de derechos humanos en el mundo. En el apartado de México, el documento destaca la participación de elementos de las Fuerzas Armadas en ejecuciones extrajudiciales, desaparición forzada y tortura.

• El reporte refiere que entre enero y agosto de 2022, la Comisión Nacional de Derechos Humanos recibió 32 denuncias de tortura y 94 de detención arbitraria en contra de fuerzas del Estado: 43 involucran a la Guardia Nacional, 37 a la Fiscalía General de la República, 24 al Ejército y 14 a la Marina.

• El asesinato de la niña de cuatro años, Heidi Mariana Pérez, en Nuevo Laredo, Tamaulipas en agosto del año pasado es citado como un caso relevante del uso desproporcionado de la fuerza de parte del Ejército.

¿Por qué importa?

• El informe del Departamento de Estado se suma a una narrativa de cuestionamientos de la Secretaría de la Defensa Nacional.

• La crítica reciente más destacada fue la de Alejandro Encinas, el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, quien dijo que el Ejército disparó contra civiles no armados en Nuevo Laredo el mes pasado, en un episodio en el que fueron asesinadas cinco personas.

• Encinas no utilizó la calificación de ejecución extrajudicial, pero responsabilizó a la Secretaría de la Defensa Nacional. Este es el funcionario que ha coordinado la investigación del caso Ayotzinapa a través de una Comisión para la Verdad y cuyo informe responsabiliza a las Fuerzas Armadas de omisión e irregularidades.

• El reporte del Departamento de Estado reconoce a Encinas por el avance de la investigación de Ayotzinapa: “El informe encontró que varios funcionarios locales, estatales y federales, por acción u omisión, estuvieron involucrados en la realización o el encubrimiento de delitos relacionados con las atrocidades”.

• La narrativa de desprestigio del Ejército también ha sido exacerbada por la investigación de la organización de derechos digitales, R3D, que encontró que el Centro de Inteligencia Militar infectó con el software de espionaje Pegasus el teléfono de Raymundo Ramos, un activista que investiga ejecuciones extrajudiciales de las Fuerzas Armadas en Nuevo Laredo.

• El espionaje se realizó con la autorización del secretario de la Defensa Nacional, el general Luis Cresencio Sandoval.

El contexto:

El presidente Andrés Manuel López Obrador desestimó el informe del Departamento de Estado: “No es cierto, están mintiendo, es pura politiquería con todo respeto. Es que es su naturaleza, no quieren abandonar la doctrina Monroe y antes el llamado destino manifiesto”.