2 de mayo 2024
Internacional
La agenda antimexicana de Donald Trump
La deportación potencial de millones de mexicanos en Estados Unidos y la implementación de tarifas radicales a las exportaciones de México prometen transformar profundamente la relación bilateral
Por Redacción Magenta
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La plataforma de Donald Trump promete una profunda disrupción en la relación bilateral de Estados Unidos con México. Los dos principales proyectos de política pública del inminente candidato presidencial del Partido Republicano, una reforma migratoria y un giro de 180 grados en la política comercial, advierten un riesgo significativo para los 11 millones de mexicanos que viven en Estados Unidos y para el modelo económico mexicano basado en el desarrollo del sector exportador.
Trump habla recurrentemente de que en la primera etapa de su potencial administración deportará a “millones de personas”. En diciembre del año pasado, Trump respondió a una pregunta del conductor de Fox News, Sean Hannity, sobre si se comportaría como un dictador. “No, no, no, sólo el primer día. Vamos a cerrar la frontera. Después de eso, ya no seré un dictador”, dijo el ex presidente. La declaración es testamento de la prioridad que ocupará la política migratoria en su gobierno.
El equipo de Donald Trump ha sido claro en que una reforma migratoria transita por la eliminación del sistema de asilo que permite a millones de migrantes esperar su proceso de resolución en territorio estadounidense. El Partido Republicano considera que este vacío legal explica en gran medida el incremento del flujo migrante registrado en el cuatrienio del presidente Joe Biden. La retórica de Trump hace referencia a que se realizará “la mayor deportación en la historia” y abre la posibilidad a que se implementen campos de concentración para que migrantes esperen una resolución judicial sobre su situación legal. Puntualmente, la plataforma del ex presidente estipula la eliminación de protecciones legales a migrantes, ejecutadas por el actual gobierno, así como el uso de la Guardia Nacional y de fuerzas federales para detener a quienes crucen la frontera de manera ilegal. Se trata de un giro radical.
En materia comercial, los cambios prometidos por Donald Trump son igualmente disruptivos. El ex presidente plantea el establecimiento de tarifas arancelarias de 10 por ciento a la importación de bienes. Esta es una iniciativa que generaría pérdidas de miles de millones de dólares para el sector externo mexicano. La exportación de bienes y servicios a Estados Unidos representa alrededor del 25 por ciento del Producto Interno Bruto de México, de acuerdo a cifras del INEGI. Trump declaró recientemente que busca abrogarse nuevas facultades de política arancelaria que le permitan establecer unilateralmente, sin la intervención del Congreso, tarifas de reacción a rivales comerciales de Estados Unidos.
El Partido Republicano ha abandonado gradualmente su apego por políticas de apertura comercial y de libre intercambio de bienes y servicios. Un sector importante de la derecha norteamericana apuesta a un nuevo enfoque de proteccionismo que privilegia la reducción del déficit comercial por encima de la eficiencia económicas y del bienestar de los consumidores domésticos.
Josh Hawley, senador republicano por Missouri, es parte de esta nueva oleada de populismo comercial. Se trata de un legislador que ha puesto en duda el crecimiento de las exportaciones mexicanas como un mecanismo utilizado por el gobierno de China para triangular sanciones arancelarias. Hawley plantea que esta operación debe ser gravada con un arancel de 100 por ciento.
La narrativa ha permeado en el equipo económico de Donald Trump e incluso ha derivado en la apertura de una investigación al respecto de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos. Un reporte de Moody’s sostiene que hay evidencia suficiente para concluir que una parte del sector exportador mexicano está siendo utilizado para evitar que la plataforma industrial de China evada aranceles estadounidenses.
La política migratoria y la política comercial son los dos temas en los que Donald Trump ha hecho énfasis en su campaña presidencial. No obstante, sus declaraciones sobre política exterior, que adelantan una postura mucho más enfocada en el Hemisferio Occidental, así como los comentarios respecto al combate a los cárteles de la droga representan temas de interés para la relación bilateral de Estados Unidos con México. Por ejemplo, Ken Cuccinelli, un ex alto funcionario del Departamento de Seguridad Interior, ha asesorado durante meses a Donald Trump y a Ron De Santis sobre una iniciativa que designe a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas.
De acuerdo al agregado de encuestas nacionales de Real Clear Politics, Donald Trump supera a Joe Biden en preferencia electoral por 1.5 puntos porcentuales. Sin embargo, el inminente candidato presidencial del Partido Republicano mantiene una ventaja marginal en prácticamente todos los estados clave de la elección: Wisconsin, Arizona, Georgia, Arizona, Michigan, Pensilvania, Carolina del Norte y Nevada.
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