Encinas fue espiado con Pegasus

¿Qué pasó?

Alejandro Encinas fue espiado con el software Pegasus, de acuerdo a una investigación de The New York Times, que fue realizada con base en entrevistas a funcionarios de alto nivel y con base en un análisis forense del dispositivo infectado.

¿Por qué importa?

• Encinas es el subsecretario de Gobernación para asuntos de Derechos Humanos.

• Se trata de un oficial con alto grado de independencia política que ha liderado la investigación de la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa.

• La presentación del primer informe de la Comisión para la Verdad y Justicia del caso Ayotzinapa se centró, en gran medida, en la responsabilidad de las Fuerzas Armadas en los eventos del 26 y 27 de septiembre de 2014.

• El documento rechazó la tesis de la llamada “verdad histórica” de que los estudiantes fueron incinerados en el basurero de Cocula.

• La tesis del grupo de trabajo que lideró Encinas incluyó presuntos mensajes de texto que comprobarían que el Ejército tuvo conocimiento completo en tiempo real de los eventos de esa noche, que miembros de las Fuerzas Armadas asistieron en la desaparición de los estudiantes, que los militares mantenían comunicación con miembros del crimen organizado y que la Secretaría de Marina habría alterado la escena del basurero de Cocula.

El contexto:

El Centro Militar de Inteligencia, que reporta al Estado Mayor, es la única entidad de gobierno que mantiene una licencia vigente de Pegasus, un software de espionaje desarrollado por la firma israelí NSO Group.

Los detalles:

• De acuerdo a fuentes cercanas al caso, referidas por The New York Times, el Centro Militar de Inteligencia es la agencia de gobierno en el mundo que más veces ha desplegado el software Pegasus.

• El Ejército ha espiado a activistas de derechos humanos cuyo escrutinio se ha centrado en la actuación irregular y ejecuciones extrajudiciales de las Fuerzas Armadas: Santiago Aguirre, director del Centro ProDh, y Raymundo Ramos, presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, son los dos ejemplos más evidentes de esta tendencia.

• The New York Times reporta que el teléfono de Encinas ha sido infectado en múltiples ocasiones. Sus comunicaciones habrían sido intervenidas en el marco de la presentación del primer informe de la Comisión para la Verdad y Justicia del caso Ayotzinapa.

• “Si alguien tan cercano al presidente como Alejandro Encinas es el centro de estos ataques, entonces está claro que no hay ningún control democrático sobre esta herramienta de espionaje”, dijo a The New York Times, Eduardo Bohórquez, director del capítulo mexicano de Transparencia Internacional.

• NSO Group ha abierto una investigación sobre el potencial uso ilegal o irregular del software Pegasus contra activistas de derechos humanos en México. El Centro Militar de Inteligencia fue el primer cliente de la compañía israelí y México es considerado uno sus principales mercados.