¿Cuánto falta para la elección?

3 de mayo 2024

10 de octubre 2022

Política

El Ejército estuvo detrás de la reforma

La Unidad de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de la Defensa Nacional fue la entidad encargada del diseño de la reforma que amplía el plazo que permite la presencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública

Por Redacción Magenta

COMPARTE ESTA HISTORIA

¿Qué pasó?

Un cable filtrado por el grupo de hackers “Guacamaya” reveló que la Unidad de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) fue la entidad encargada del diseño de la reforma que amplía el plazo que permite la presencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.

¿Por qué importa?

El cabildeo del secretario de la Defensa, General Luis Cresencio Sandoval y el secretario de Marina, Almirante Rafael Ojeda, ha coincidido con la publicación de los expedientes obtenidos a partir de la vulneración de los servidores del Ejército, el hackeo de ciberseguridad más importante en la historia del país.

El contexto:

La semana pasada, nueve senadores del PRI y dos del PRD (los 11 votos que Morena necesitaba para modificar leyes secundarias) votaron a favor del dictamen que extiende la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública hasta 2028, reforma crucial que redefine la relación del poder cívico con el poder militar.

Los detalles:

  • De acuerdo a correos electrónicos hackeados de los servidores de la Sedena, el 29 junio de este año, la Secretaría de la Defensa informó que tenía listas dos iniciativas de reforma en materia de Guardia Nacional, esto en una reunión de trabajo con la Secretaría de Gobernación, que preside Adán Augusto López.
  • A través de la Unidad de Asuntos Jurídicos, el Ejército Mexicano presentó el pasado 1 de julio de 2022, un “plan A” y un “plan B” de reformas en torno a la discusión de la militarización, a la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal.
  • El primero de ellos consistía en realizar modificaciones al artículo 21 constitucional, con la finalidad de que la Guardia Nacional fuera reconocida como “Fuerza Armada con la función esencial de proporcionar la seguridad pública”, con “carácter permanente y naturaleza militar” y “adscrita a la Secretaría de la Defensa Nacional”.
  • Además, la propuesta incluía que los recursos financieros y materiales adscritos a la Guardia Nacional por medio de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) fueran transferidos directamente a la Sedena.
  • Inclusive, se tenía previsto reformar el artículo 13 de la Constitución con el objetivo de que los miembros de la Guardia Nacional quedaran sujetos al fuero militar para los delitos y faltas contra la disciplina militar, únicamente “para efectos estrictamente disciplinarios”.
  • Por el contrario, el denominado plan B consistía en un paquete de reformas secundarias que incluía la ley Orgánica de la Administración Pública Federal; ley de la Guardia Nacional; la ley Orgánica y de Ascensos y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, el cual finalmente fue aprobado.
  • “Ante la advertencia de los grupos parlamentarios de la oposición de que no darían los votos para una reforma constitucional para que la Guardia Nacional, una institución que se suponía debía ser civil, quedara en manos de la Sedena, el plan B fue el que prosperó”, reportó al respecto el semanario Proceso.
  • Según consta en varios oficios y correos hackeados al Ejército, de manera consensuada, la Sedena y la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal se mantuvieron trabajando en la iniciativa durante julio y agosto.
  • Luego de varias mesas de trabajo entre la Sedena, la Consejería Jurídica y la Secretaría de Seguridad, el 31 de agosto ya se tenía una iniciativa final, donde la principal aclaración era que la adscripción sería a la SSPC, pero el Ejército tendría el control operativo y administrativo de la Guardia Nacional.
  • En esa misma fecha, tras el visto bueno de la Procuraduría Fiscal de la Federación acerca del impacto presupuestario que tendría el proyecto, el trámite siguió su curso para que la iniciativa llegara al legislativo. El propio presidente Andrés Manuel López Obrador la envió como suya a la Cámara de Diputados.
  • Un análisis comparativo llevado a cabo por Proceso, en el que se cotejaron las reformas aprobadas y los documentos enviados por Sedena a la Consejería Jurídica de la presidencia, concluyó que “el espíritu de la propuesta militar se mantuvo y sólo sufrió ligeros cambios”.
Publicidad
Publicidad
Publicidad