“Aunque les cueste, abrazos, no balazos”

El presidente Andrés Manuel López Obrador justificó el elevado índice de homicidios con el argumento de que la tasa de cambio de la violencia ha disminuido durante su sexenio.

“Nuestra estrategia requiere de tiempo porque es atender las causas”, expresó el mandatario durante su conferencia matutina de este miércoles, celebrada en Palacio Nacional.

¿Por qué importa? Este discurso es una continuación de una narrativa abocada a minimizar los actos de violencia perpetrados por el crimen organizado durante la última semana.

López Obrador ha sido particularmente evasivo cuando se le pregunta por el deterioro de la seguridad pública o el avance del control territorial del crimen organizado.

Contexto: El presidente se ha apegado a la máxima de “abrazos, no balazos”. Sin embargo, datos del Monitor del Uso de la Fuerza Letal sugieren que el índice de letalidad de los agentes de seguridad del Estado mexicano se ha incrementado en esta administración.

No existe evidencia empírica suficiente para concluir que existe una relación entre la implementación de los programas sociales de esta administración con una reducción de la violencia.