Taboada inaugura la disputa con Brugada por la Ciudad de México

Santiago Taboada, candidato del PAN-PRI-PRD a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, inició su campaña en el Ángel de la Independencia: “En esta elección sólo hay dos opciones, la primera, la de la clara continuidad, el de la clara corrupción, el de las claras tragedias… y la nuestra, la que representa seguridad, justicia, calidad de vida”.

La contienda por el control político de la Ciudad de México no podría ser más disímbola. Por un lado, está el proyecto de Taboada, el ex alcalde panista de Benito Juárez que enfocó su administración en tareas de seguridad pública. La candidatura ha incorporado a su equipo de trabajo a un grupo de políticos profesionales que fueron parte del gabinete de Felipe Calderón: Roberto Gil Zuarth, Ernesto Cordero y Javier Lozano. Un giro a la derecha en una ciudad que durante décadas ha sido un estandarte progresista.

Taboada representa al primer candidato panista con una oportunidad realista de ganar la elección desde que Santiago Creel fue vencido de manera marginal por Andrés Manuel López Obrador en el año 2000.

Por otro lado, Morena ha postulado como candidata a la jefatura de Gobierno a Clara Brugada, un perfil del ala más a la izquierda del partido que es parte de un grupo cercano al presidente López Obrador. Este proyecto ha sido auspiciado por Jesús Ramírez Cuevas, vocero de Presidencia, y por Martí Batres, jefe de Gobierno en funciones de la Ciudad de México.

Brugada obtuvo la candidatura en una encuesta interna de Morena que desplazó a Omar García Harfuch, el ex secretario de Seguridad Pública de la capital que era impulsado por Claudia Sheinbaum, ex jefa de Gobierno y actual candidata presidencial de Morena. La división entre el entorno de Sheinbaum y de Brugada ha derivado en acusaciones cruzadas de sabotaje y alianzas clandestinas con la oposición. Esta semana, el periodista Carlos Loret publicó que la candidata presidencial dio la orden a su equipo de dejar de apoyar a Brugada. Además, Sheinbaum habría tendido puentes con Taboada para abrir la conversación sobre un pacto subrepticio para vencer a Brugada. Aunque Sheinbaum negó públicamente la información, sus allegados han criticado la hostilidad contra la candidata presidencial del grupo que impulsó a Brugada.

La política emblema de la Brugada, ex alcaldesa de Iztapalapa, fue el desarrollo de infraestructura social urbana, complejos denominados “Utopías” que funcionan como centros comunitarios en zonas marginadas de la ciudad.

El consenso de analistas anticipa una elección cerrada en la Ciudad de México. Un ejercicio de Enkoll, una casa encuestadora cercana a Morena que ha obtenido contratos públicos con Presidencia en este sexenio, muestra que, al cierre de febrero, Brugada contaba con una preferencia electoral bruta de 56 por ciento contra un 40 por ciento de Taboada.

La semana pasada, el presidente Andrés Manuel López Obrador se quejó en la conferencia mañanera que la Ciudad de México “se está derechizando”, un comentario sobre el triunfo del Frente Amplio por México en la mitad de las alcaldías en el proceso electoral de 2021. Las palabras del presidente revelan inquietud en el círculo rojo de la izquierda capitalina.