Maquillaje al informe

Estamos en la víspera del cuarto informe de gobierno del presidente Enrique Peña Nieto. El final del segundo tercio, entrando a lo que se llaman los dos años de salida y sucesión.

La gran novedad, al menos las que nos venden los mercadólogos de Los Pinos, es la presentación del mensaje presidencial en un novedoso formato.

Qué bueno que se busquen nuevos esquemas, que se intente que la comunicación sea mas directa y efectiva, pero eso no es suficiente. Si acaso es maquillaje llamativo. Eso es todo.

Lo que hace falta -mas allá de modificar la forma- es cambiar el fondo de las tesis de un gobierno lleno de buenas intenciones, pero incapaz de reaccionar a su cambiante entorno nacional e internacional.