Los enredos de Ricardo Anaya

Probablemente has visto a Ricardo Anaya defenderse en los medios y en sus redes sociales de una acusación de lavado de dinero

La gente del Frente dice que se trata de una campaña de guerra sucia en el PRI, pero el caso se está complicando.

¿De qué se le acusa?

Dos personas con identidad reservada que han sido imputadas por la PGR sostienen que fueron parte de un esquema de lavado de dinero para triangular recursos privados a favor del candidato del Frente a través de la venta de una nave industrial en el estado de Querétaro en el 2016 que era propiedad de Ricardo Anaya y su familia.

De acuerdo al abogado de estas personas, Joaquín Xamán McGregor, se utilizaron empresas fantasma y paraísos fiscales para hacerle llegar 54 millones a una empresa del candidato del Frente.

Estas dos personas dicen haber sido contratadas por el empresario Manuel Barreiro para operar esta transacción. No está claro si se trata de recursos de procedencia ilícita o no.

¿Cómo se defiende?

La defensa de Anaya es simple: dice que no es su obligación legal saber el origen de los recursos de la operación porque el contrato de la venta de la nave industrial estipula una cláusula en la que el comprador declara que se está utilizando dinero de procedencia lícita.

Ricardo Anaya asegura que no conoce al empresario Manuel Barreiro y que la transacción se hizo con una compañía, no con una persona física.  El candidato del Frente explica que el dueño de esta compañía es el Arquitecto Juan Carlos Reyes.

Entonces, ¿cuál es el problema?

El problema es que el parque industrial en el que se ubica la nave industrial en cuestión es propiedad de Manuel Barreiro.

Y ahora sabemos que el dueño de esta compañía no es el arquitecto Juan Carlos Reyes. La campaña de José Antonio Meade dio a conocer que los registros públicos muestran que los dueños de la empresa que operó la transacción fue constituida por el chofer de  Manuel Barreiro y por otra empleada del empresario queretano.

¿Anaya está imputado por la PGR?

No, Anaya sólo figura como parte de una investigación de lavado de dinero en contra de Barreiro que fue abierta desde octubre.

De hecho, el candidato del Frente acudió el fin de semana a la PGR para exigir que se aclare públicamente su situación legal. Anaya no ha sido citado a declarar de manera obligatoria.

Por otra parte, Barreiro, que de acuerdo a un reporte de El Universal se encuentra en Canadá, no ha sido imputado aún y, por el momento, está blindado jurídicamente de que se le gire una orden de aprehensión.

¿Cuál es el contexto político de la acusación?

Anaya y sus voceros, incluido su asesor legal, Diego Fernández de Cevallos, insisten en que la PGR está siendo utilizada como un instrumento político del gobierno de Enrique Peña Nieto.

Ricardo Anaya y el candidato del PRI, José Antonio Meade, se disputan el segundo lugar en las encuestas de cara a la elección presidencial. El candidato del Frente lleva ventaja en la mayoría de los sondeos, lo que lo colocaría como la opción política que puede reunir el voto útil de la derecha para competir con un muy adelantado López Obrador.

El enredo está ahí… y las elecciones, a la vuelta de la esquina.