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20 de junio 2018

Política

Los desvíos en Tamaulipas

Elecciones 2018

A días del 1 de julio, el gobierno de Tamaulipas señaló a los dos ex gobernadores del PRI, de un faltante en el fondo de pensiones de los 44 mil servidores

Por Lourdes González

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La acusación contra los ex gobernadores Eugenio Hernández y Egidio Torre Cantú por la presunta desaparición de dinero del Fondo de Pensiones de la burocracia estatal es investigada por el gobierno panista, a través de la Auditoría Superior del Estado.

Fue a través de la Contraloría del estado que se encontró la inconsistencia financiera en las administraciones anteriores que encabezaron los dos priístas, de los cuales, Eugenio Hernández fue detenido el 6 de octubre pasado, en Ciudad Victoria y enfrenta un proceso de extradición a Estados Unidos para responder a imputaciones de lavado de dinero.

La supuesta irregularidad de alrededor de mil 300 millones de pesos que corresponden al ahorro de los empleados estatales, se realizó a través de la Secretaría de Finanzas, según medios locales.

En la investigación se involucró a Óscar Almaraz Smer, candidato del PRI a la alcaldía de Ciudad Victoria, por la vía de la reelección, quien ocupó la Secretaría de Finanzas, cuando ocurrió el supuesto desfalco.

Durante el proceso de entrega recepción de la administración, con la llegada al gobierno del estado del panista Francisco García Cabeza de Vaca, se detectó el faltante millonario, que afecta a siete mil 042 pensionados estatales y coloca en una situación crítica al fondo para el retiro de los trabajadores del gobierno del estado.

 

El principal afectado es el Instituto de Previsión y Seguridad Social del Estado de Tamaulipas (Ipsset), que administra los fondos de los burócratas y que realizó un requerimiento a la Secretaría de Finanzas del estado, en agosto de 2017 por mil 282 millones de pesos más intereses, que corresponde a las aportaciones del trabajador, los préstamos y el seguro de retiro.

A petición del Instituto, la ASE estableció que la Secretaría de Finanzas descontó y retuvo aportaciones a los empleados estatales, de los fondos de retiro, la caja de ahorro, del fondo personal de educación, de la Secretaría de Salud, estatal, sin regresarlo al organismo.

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