La situación humanitaria se agrava en Gaza

Hace diez días, militantes armados de Hamás emprendieron una cruzada terrorista para asesinar, mutilar, violar y secuestrar a más de 1,400 judíos de Israel.

Se trató de una operación terrorista que sacudió por completo al aparato de seguridad e inteligencia de Tel Aviv y que, de acuerdo a fuentes citadas por The Wall Street Journal, fue coordinado por funcionarios de la Guardia Revolucionaria de Irán. El atentado representa el evento más grave de asesinato de judíos desde el Holocausto.

Ahora, la atención ha virado hacia el rápido deterioro de la situación humanitaria en Gaza. Los bombardeos de Israel, una política de respuesta a los ataques terroristas abocada a la exterminación de Hamás, han provocado la muerte de al menos 3 mil civiles palestinos y ha colapsado los servicios básicos y hospitalarios de la región.

Israel mantiene bloqueado el paso de Rafah, la principal vía de acceso de asistencia humanitaria a Gaza, de acuerdo a un reporte de la agencia de refugiados de la Organización de las Naciones Unidas. El diagnóstico de este organismo confirma, además, que el ejército israelí atacó el sur de Gaza, pese a que le pidió a la población civil desplazarse hacia esa zona.

La Organización Mundial de la Salud reitera que Gaza necesita de manera urgente la reactivación de la ayuda humanitaria, puesto que la falta de combustible ha dejado inoperante el hospital oncológico del territorio.

El Ministerio de Defensa de Israel ha cercado Gaza. La política contraviene el llamado que hizo Tel Aviv a la población palestina a retirarse de la zona. Es una exigencia imposible. Egipto y Jordania se mantienen firmes en que no aceptarán refugiados palestinos y han complementado el bloqueo a Gaza.