La rebelión de Morena contra Mario Delgado

Dentro del gobierno de la Cuarta Transformación, no todos consideran positivo lo alcanzado por Morena en estas elecciones intermedias.

Desde al menos dos frentes -o tres- ya se vislumbra una nueva disputa por el control del partido oficial.

Para el senador morenista y fundador del Ala Democrática del partido, Alejandro Rojas Díaz Durán, el solo hecho de que la oposición se haya fortalecido constituye un tropiezo del líder nacional, Mario Delgado,

Y es que, dentro de Morena, ya comienza la recta final rumbo a 2024 y el panorama se complica para algunos.

Por un lado, un Marcelo Ebrard fuertemente golpeado por el tema de la Línea 12 y de pasada, por su añeja cercanía con el actual dirigente nacional, Mario Delgado.

Por el otro, una Claudia Sheimbaum que caminaba firme pese a los estragos de la pandemia en la capital y por la tragedia en el metro, hasta que sucedió la debacle electoral para Morena en la Ciudad de México.

Y por el tercer flanco, un Ricardo Monreal fortalecido -al igual que su suplente Alejandro Rojas Díaz Durán- tras las victorias en Zacatecas, Tamaulipas y el impresionante resultado del Partido Verde. Pues no olvidemos el papel que ha desempeñado el influyente senador morenista en la alianza que mantiene el Verde con el partido oficial; una alianza fundamental para asegurar la mayoría de Morena en el Congreso y para elevar su cuota de poder.

Mientras tanto, aquellos miembros del partido que pretenden arrebatarle el control a Delgado, buscarán señalar los fracasos en estas elecciones intermedias, sobre todo en la Ciudad de México.

Ante esta situación, plantea Rojas Díaz Durán, lo que Morena requiere es una revolución interna.

¿Lograrán los rebeldes destronar a Mario Delgado?