La Contrarreforma de Norma Piña: “La demolición judicial no es la vía”

¿Qué pasó?

Norma Piña, la ministra presidenta de la Suprema Corte y del Consejo de la Judicatura Federal que ha liderado la oposición a la Reforma Judicial, finalmente hizo pública una propuesta alternativa para reformar el sistema de justicia mexicano.

¿Por qué importa?

• El documento recoge las experiencias y conclusiones de las judicaturas federales y estatales. Se trata de una síntesis de propuestas de corte progresista y “garantista” que contrastan con el tono populista y punitivo de la iniciativa enviada al Congreso por el Poder Ejecutivo.

• La contrarreforma representa una reacción a la crítica del oficialismo de que el actual liderazgo del Poder Judicial ha dejado pasar oportunidades para reformar el sistema y ha permitido que se exacerben vicios como la impunidad, el nepotismo y la corrupción.

• La alternativa ha llegado sobre la hora de que concluya el trámite legislativo de la Reforma Judicial en el Senado, apenas tres días antes de que se vote la iniciativa en el Pleno. El domingo, la Comisión de Puntos Constitucionales autorizó el dictamen enviado por la Cámara de Diputados. No se hicieron cambios.

El contexto:

La propuesta empujada por la ministra Piña no se limita a una crítica de la actual Reforma Judicial, sino que plantea políticas y cambios enfocados a ministerios públicos, atención a víctimas, desmilitarización de la seguridad pública e impartición de justicia a nivel local.

Los detalles:

• El contraste más evidente de la contrarreforma es que propone sustituir la elección por voto popular de ministros, magistrados y jueces por una Ley Nacional que privilegie reglas claras y estrictas sobre el servicio de carrera judicial.

• El documento también rechaza la creación de un Tribunal de Disciplina Judicial. En cambio, refiere que deben promoverse reformas normativas en los estados que aseguren que los procedimientos de sanción contra los jueces sean responsabilidad de un órgano independiente.

• “Esta propuesta parte de un ejercicio amplio de escucha y diálogo con todos los actores de los sistemas de seguridad y justicia federal y locales, así como con legisladores, organizaciones de la sociedad civil, academia, estudiantes y víctimas de violencia”, dijo Piña.

• El documento completo puede consultarse aquí (dar click).