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20 de septiembre 2024

18 de febrero 2022

Política

El gran fiasco del caso Odebrecht en México

Mientras que en algunos países las investigaciones del caso Odebrecht han revelado entramados de corrupción político-empresarial al más alto nivel, en México el caso apenas acabó con la imputación del ex director de Pemex, Emilio Lozoya y de su madre

Por Magenta Staff

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No existe ninguna duda: el caso Odebrecht ha sacudido las esferas del poder político y económico en el hemisferio occidental. 

Pero sus efectos no han sido uniformes. Mientras que en algunos países las investigaciones han revelado entramados de corrupción político-empresarial al más alto nivel, en México -pese a que se ventilaron varias pistas importantes- el caso apenas acabó con la imputación del ex director de Pemex y de su madre. 

Este lunes 14 de febrero, luego de cinco años de investigaciones, la Fiscalía General de la República concluyó que los sobornos por poco más de diez millones de dólares que la constructora Odebrecht pagó en México, fueron transferidos exclusivamente al exdirector de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya Austin.

De acuerdo con documentos judiciales obtenidos por el portal Animal Político, la Fiscalía encabezada por Alejandro Gertz Manero señala que gracias a estos sobornos la empresa brasileña fue favorecida con la adjudicación del contrato para realizar obras en la refinería de Tula, propiedad de Pemex.

Y aunque Lozoya denunció que él fue utilizado por el expresidente Enrique Peña Nieto y el ex secretario de Hacienda, Luis Videgaray, y que el dinero se usó para sobornar a legisladores y agilizar la llamada Reforma Energética, en su acusación la Fiscalía no valida ninguna de esas hipótesis.

Como bien destaca Animal Político, todas las pruebas que presenta la autoridad están enfocadas en confirmar que Lozoya y sus familiares fueron los reales beneficiarios de los sobornos.

Por lo cual piden 46 años y seis meses de prisión sin derecho a ningún beneficio para el ex director de Pemex. Así como pagar una multa de 87 millones 252 mil 442 pesos.

La madre de Lozoya, Gilda Susana Austin, también ameritaría tiempo en prisión, así como una multa económica. 

En cuanto a la trama de los famosos supuestos sobornos, el único personaje que se encuentra en prisión preventiva como parte de la investigación es el ex senador panista Jorge Luis Lavalle Maury.

De los principales testigos que podrían aportar pistas sobre quiénes ordenaban el reparto del dinero, dos han fallecido por causas aparentemente naturales y los otros cuatro aseguran no saber de dónde provenía el dinero. 

En este contexto, el caso anticorrupción más importante de la Cuarta Transformación se queda corto. 

En un inicio, se perfilaba a que Emilio Lozoya exhibiría corrupción al más alto nivel, para salvarse a sí mismo. 

Pero, a pesar de acumular prórroga tras prórroga, el ex director de Pemex no ha podido reunir evidencia contundente que dé sustento a sus acusaciones. 


El resultado preliminar del caso Odebrecht en México contrasta con los efectos de la investigación en otros países de América Latina. 

En Perú, por ejemplo, el escándalo ha tocado a cuatro ex presdientes. Uno de los cuales se quitó la vida a raíz de las revelaciones. En Brasil, el presiente de la constructora más grande de América Latina fue sentenciado a 19 años de prisión. 

En República Dominicana, un ministro de justicia involucrado en la trama recibió una condena de 5 años de prisión. 

Y en Estados Unidos, la compañía se hizo acreedora a la multa corporativa más alta jamás impuesta por el Departamento de Justicia a una compañía acusada de corrupción. 

Mientras tanto, en México, el caso anticorrupción emblema que prometía exhibir la corrupción de toda una clase política, pudiera acabar pronto con Lozoya tras la rejas y sin una explicación de quién ordenó los supuestos sobornos para la reforma energética de 2013. 

Aunque el deseo del presidente -y de gran parte de la población mexicana- sea otro. 

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