El deporte llega a los puños

Alzar el puño no es un mensaje nuevo en el deporte internacional, desde hace años esta pose ha externado señales de apoyo, rechazo y ahora homenaje.

Esta semana vimos en prácticamente todos los estadios de la Liga MX a jugadores y aficionados levantar el puño, emulando la señal de silencio que tantas veces vimos en los últimos días mientras se buscaban sobrevivientes de los sismos.

En esta ocasión no se pidió silencio, sino que era una manera de homenajear a todos aquellos que colaboraron en las labores de rescate.

Pero este puño en alto no es nuevo en la escena deportiva. Hay que recordar los Juegos Olímpicos de México en 1968, cuando los atletas Tommie Smith y John Carlos, oro y bronce respectivamente en la prueba de 200 metros, subieron al podio con un guante negro en su mano derecha y alzaron el puño mientras agachaban su cabeza.

Aquel fue un mensaje de protesta por la falta de respeto a los derechos civiles de los afroamericanos en Estados Unidos.

Y en el mismo tono, el fin de semana pasado vimos a jugadores de la NFL hincados, con los brazos unidos con los compañeros o con el puño en alto, también en protesta pero ahora contra los comentarios del presidente Donald Trump.

Esta pose y el mundo del deporte tienen mucha relación, y por lo pronto la vimos en la Jornada 11 de la Liga MX en señal de apoyo a México y sus ciudadanos.