[hurrytimer id="116852"]
4 de octubre 2024

22 de mayo 2017

¡Que alguien me explique!

Anaya, Barrales y Edomex

Ricardo Anaya y Alejandra Barrales anunciaron que PAN y PRD irían juntos rumbo en 2018. ¿Será que se dará una alianza de última hora en las elecciones del Edomex?

Por Ramón Alberto Garza

COMPARTE ESTA HISTORIA

Una nueva fractura amenaza al de por sí dividido Partido Acción Nacional. Y el epicentro de este sismo se ubica en el Estado de México.

Para nadie es un secreto que la campaña de Josefina Vázquez Mota no prendió como se esperaba. Todas las encuestas la ubican o estancada, en el mejor de los casos, o a la baja, en el peor.

Para algunos, a la candidata albiazul le faltó el arropamiento de su partido, el apoyo económico suficiente, pero sobre todo un discurso que se despegara de sus rivales punteros Del Mazo y Delfina Gómez.

Por eso a Josefina se le comenzó a emparejar Juan Zepeda, el candidato del PRD que por su propuesta y discurso es el que mas avanzó en la contienda.

Por ahora la apuesta de Josefina radica en que el 28 por ciento de los indecisos sean mayoritariamente simpatizantes del PAN. Y que eso sea suficiente para ganar por una nariz. No es imposible, aunque quizá poco probable.

Y es por esa incertidumbre que en las cúpulas de Acción Nacional suenan las sirenas de alarma. Porque saben que si su candidata termina en tercero o cuarto lugar, el camino rumbo a la presidencia 2018 estará cuesta arriba.

Sobre todo si Morena se adueña del Estado de México.

Pero la alarma es doble, tomando en cuenta que Ricardo Anaya, el actual presidente del PAN, tiene bien encendidos los motores para adueñarse, sin despeinarse, de la candidatura presidencial.

Por eso al joven maravilla le preocupa sobremanera el no despegue de Josefina. Y es por esa preocupación es que Anaya parece estar tejiendo ya su plan B para el Estado de México.

Algunos de sus allegados advierten que el presidente nacional del PAN está sentado horas extras a la mesa, en lo personal, con Zepeda y los líderes del PRD.

Anaya ve que la inercia de crecimiento del candidato del Sol Azteca es muy fuerte, y antes de ver que el PAN y Josefina no repunten o se desplomen todavía mas, negocia una alianza.

¿Una alianza en la que la panista declina en favor del perredista? Sí, porque es preferible ganar en incómoda compañía que tener una debacle en la digna soledad.

Pero el posible pacto personal entre Anaya y Zepeda para aventajar en el Estado de México tiene su factura en el 2018.

En concreto, para buscar una alianza PAN-PRD con Anaya como candidato presidencial.

Por supuesto que Josefina está molesta cuando le dicen que el presidente de su partido ya sostuvo tres encuentros personales de negociación con los jerarcas del PRD.

Y esa indignación se eleva, cuando vuelven a la mente los recuerdos de aquellos panistas que en el 2012, siendo Josefina la candidata presidencial, la traicionaron y se entregaron al PRI. ¿Te acuerdas, Vicente? ¿Tienes memoria, Felipe? ¿Ya se te olvidó, Gil Zuarth?

Dicen los que saben que de salir airoso el plan B entre Anaya y Zepeda, la supuesta declinación se concretaría entre esta y la próxima semana, unos días antes de la elección. ¿Los dejarán Josefina y los rivales presidenciales de Anaya?

En este contexto hay que ubicar el sorpresivo anuncio del pasado sábado en el que Anaya y Alejandra Barrales anunciaron que el PAN y el PRD irían juntos rumbo en 2018.

¿Será que en el Edomex se dará una alianza de última hora PRD-PAN, a cambio de que Los Pinos 2018 sea PAN-PRD?

No falta mucho para saberlo.

Publicidad
Publicidad
Publicidad