15 de julio 2016
Internacional
Terrorismo: Armados de odio
Mientras el ataque en el bar de Orlando encendió el debate sobre el uso de armas, en el atentado en Niza pasaron a segundo plano
Por Magenta Staff
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A un mes de que el ataque terrorista de Orlando encendiera el debate sobre las armas de fuego en Estados Unidos, ayer otro atentado masivo en Francia sacudió al mundo.
La diferencia está en que en éste último, las armas pasaron a segundo plano.
Tras la matanza de Orlando y la creciente ola de violencia que se vive en el mundo, el debate sobre la legalización y el uso de las armas ha cobrado fuerza.
Unos argumentan que el acceso a las armas abre la puerta a los ataques, mientras que otros defienden la necesidad de tenerlas para la defensa en casos como estos.
Pero ayer por lo menos 75 personas perdieron la vida y un centenar resultaron heridas en Niza, Francia, y la masacre no requirió el uso de armas de fuego.
En un incidente catalogado por las autoridades como un atentado terrorista, un hombre utilizó un camión para arrollar a la multitud reunida por la fiesta nacional de Francia.
Y aunque el responsable de la masacre sí estaba armado y la carga del camión incluía armas de fuego y granadas, la mayoría de las víctimas murieron atropelladas.
El incidente muestra el reto que enfrentan las autoridades en el combate del terrorismo.
Cualquier extremista puede causar una masacre sin planes sofisticados ni el uso de armas.
El atacante fue abatido por la policía al bajar del vehículo, pero su cometido, sembrar el terror, ya había sido logrado.