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1 de enero 2017

Entretenimiento

2016, ¿el fin de idolatrar famosos?

Este año se comprobó que las celebridades son tan humanos como el resto: unos murieron y otros declararon problemas de salud mental

Por Magenta Staff

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El 2016 estuvo lleno de crisis políticas internacionales y desde una perspectiva general no fue un año fácil, tanto que hasta la cultura pop tuvo sus sacudidas. Sí, ni los famosos se salvaron de las tragedias.

Asaltaron a Kim Kardashian en París y después del acontecimiento se aisló y abandonó sus redes sociales, un mes después su esposo Kanye West canceló su gira Saint Paolo para internarse en un hospital psiquiátrico.

Selena Gómez dejó tanto las redes sociales como los escenarios por temas de salud mental y reveló que tiene Lupus, una enfermedad autoinmune e incurable. La súper modelo de Victoria’s Secret, Gigi Hadid, también declaró que padece Hashimoto, una enfermedad tiroidea crónica y su novio, Zyan Malik siguió su ejemplo al aceptar que sufre de depresión y que enfrentó un desorden alimenticio.

La lista sigue: El rapero Kid Cudi admitió que tuvo problemas de depresión y una adicción a narcóticos que lo hicieron sentir “que vivía dentro de una pesadilla”. Además, al hijo de tres años de Michael Bublé le diagnosticaron cáncer de hígado y toda su fama y dinero no han logrado erradicar la enfermedad. Tampoco hubo inmunidad a la muerte ya que se despidieron artistas como David Bowie, Prince y Juan Gabriel.

Sí, este año descubrimos que las celebridades son tan humanos como el resto pero la pregunta para el 2017 es: ¿con esto llegará el fin de idolatrarlos?

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